La mansión de Kanye West en Malibú, California, ha experimentado un cambio significativo en su precio en los últimos meses. Inicialmente, el rapero esperaba vender la propiedad por $53 millones de dólares, pero al no atraer compradores, ha decidido rebajar el precio a $39 millones de dólares, lo que representa una reducción de $14 millones de dólares.
West adquirió la residencia en 2021 por $57 millones de dólares, pero desde entonces ha enfrentado varios problemas relacionados con el estado de abandono en el que se encuentra la propiedad.
Aunque inicialmente planeaba renovarla, el proyecto se detuvo y algunos miembros de su equipo de trabajo incluso lo demandaron por querer convertirla en una casa prácticamente inhabitable.
A pesar de su estado actual, el agente de bienes raíces Jason Oppenheim está tratando de vender la propiedad destacando su gran estructura original, construida con 1,200 toneladas de hormigón y 200 toneladas de acero como refuerzo.
La casa principal cuenta con 4,000 pies cuadrados distribuidos en varias habitaciones y comodidades, aunque su distribución puede ser adaptada por el nuevo comprador.
A pesar de su ubicación privilegiada con acceso directo a la playa y vistas panorámicas, es probable que la propiedad esté dirigida principalmente a contratistas o inversores interesados en reconstruir y mejorarla para luego ponerla de nuevo en el mercado en mejores condiciones.