Este martes, la policía turca anunció la detención de 147 presuntos miembros del Estado Islámico (EI), el grupo terrorista que reivindicó el atentado en Moscú, según informó el ministro del Interior turco, Ali Yerlikaya.
De acuerdo con Yerlikaya, los sospechosos, acusados de llevar a cabo actividades relacionadas con el EI, fueron capturados en varias operaciones simultáneas en 30 de las 80 provincias de Turquía. Durante estas operaciones, la policía incautó una gran cantidad de divisas, documentos de la organización terrorista y material digital, aunque no se revelaron las identidades ni nacionalidades de los detenidos.
El operativo se desplegó poco después de conocerse que dos de los cuatro supuestos autores del ataque del 22 de marzo habrían pasado por Turquía.
Según fuentes de seguridad citadas por el ministro, los atacantes, que no tenían antecedentes de búsqueda, pudieron viajar entre Turquía y Rusia utilizando sus pasaportes.
El Ministerio del Interior ha llevado a cabo 1,329 operaciones contra el EI desde el pasado 1 de junio, resultando en la detención de casi 3,000 sospechosos, según afirmó Yerlikaya.
El atentado más reciente del EI en Turquía ocurrió el 28 de enero en la iglesia católica italiana de Santa María, en Estambul, dejando un muerto y varios heridos.
El lunes, el presidente ruso Vladimir Putin reconoció que el atentado fue cometido por «islamistas radicales», aunque insinuó nuevamente que podrían tener relación con Ucrania.
La justicia rusa decretó el domingo prisión preventiva por dos meses para cuatro sospechosos de perpetrar el atentado en la popular sala de conciertos rusa Crocus City Hall, que dejó al menos 180 muertos el viernes.