El Primer Ministro del Reino Unido, Rishi Sunak, ha generado controversia al incluir a los perros de la raza American Bully XL en una ‘lista negra’ y declarar ilegal su posesión.
Esta medida surge como respuesta a una serie de incidentes relacionados con ataques de estos canes. Sunak argumenta que representan un peligro, especialmente para los niños, y que la acción era urgente después de la trágica muerte de un hombre en septiembre.
La nueva legislación, que entra en vigor el 1 de febrero, considera un delito penal la tenencia de estos perros, con multas y la posibilidad de confiscar y sacrificar a los animales.
La medida ha generado críticas y preocupación entre los defensores de los animales y activistas, quienes argumentan que la raza ha sido injustamente estigmatizada y que la prohibición no aborda adecuadamente el problema.
Se suma a la lista de razas prohibidas en el Reino Unido, junto a otras como el Pit Bull terrier, el tosa japonés, el dogo argentino y el fila brasileño, reguladas por la ley de perros potencialmente peligrosos (PPP) de 1991.