Un terremoto de magnitud 6,4 golpeó Nepal, causando la muerte de al menos 157 personas y dejando más de 150 heridos. Este sismo, que ocurrió en las regiones de Jajarkot y Rukum Occidental, es el más mortífero registrado en Nepal desde el devastador terremoto de 2015 que cobró la vida de casi 9.000 personas. En Jajarkot, el epicentro del terremoto, al menos 105 personas perdieron la vida y 81 resultaron heridas, mientras que en el distrito de Rukum Occidental, otras 52 personas fallecieron y 85 resultaron heridas.
Las labores de rescate se han visto dificultadas debido a la topografía montañosa y el acceso limitado por carretera en estas regiones remotas. Además, muchas áreas afectadas carecen de red de telefonía móvil y electricidad. El Ejército nepalí ha movilizado helicópteros y aviones para evacuar a los heridos a ciudades como Nepalgunj y Katmandú.
Nepal, ubicado en una región propensa a desastres naturales, enfrenta desafíos considerables debido a su población mayormente vulnerable y la falta de infraestructura adecuada para hacer frente a terremotos e inundaciones. La estructura de las casas en estas regiones montañosas contribuyó al alto número de víctimas, ya que muchas viviendas están construidas con materiales como barro y piedra en terrenos escarpados.
El terremoto de 2015 en Nepal dejó una huella devastadora en el país, con miles de muertos, heridos y daños significativos. A pesar de los esfuerzos de reconstrucción en curso, Nepal aún se está recuperando de esa tragedia.