El director de la policía de Haití, Frantz Elbé, espera que la fuerza multinacional aprobada por la ONU pueda ayudar a la Policía Nacional Haitiana (PNH) a luchar de manera más efectiva contra las pandillas armadas que están generando un «terror generalizado» en el país. La Policía Nacional Haitiana no fue originalmente creada para enfrentar a grupos criminales armados, pero ahora se enfrenta a pandillas con un amplio arsenal de guerra, conexiones con redes criminales y mafiosas transnacionales, y considerables recursos financieros.
Haití ha experimentado una profunda crisis económica, política y de seguridad, lo que ha fortalecido el control de las pandillas en la capital, Puerto Príncipe, donde controlan alrededor del 80% de la ciudad. Los abusos cometidos por estas pandillas, que están más armadas y numerosas que antes, incluyen violaciones, francotiradores en los tejados, quema de personas vivas y secuestros para pedir rescates. La inseguridad ha llevado a miles de personas a abandonar sus hogares, y ha surgido un movimiento de autodefensa.
La misión internacional aprobada por la ONU está compuesta por mil efectivos liderados por Kenia y tiene como objetivo ayudar a la policía haitiana a enfrentar las pandillas. Se espera que esta fuerza pueda llevar a cabo operaciones a gran escala para desmantelar las bandas armadas y ayudar a la policía local a realizar sus operaciones de manera más efectiva, ya que actualmente carece de suficientes recursos y personal especializado para abordar la situación.