La Organización de las Naciones Unidas expresó este lunes una creciente preocupación por las necesidades humanitarias en zonas palestinas mientras Israel intensificaba sus acciones militares e imponía un asedio sobre Gaza, después de que combatientes de Hamas llevaron a cabo un ataque durante el fin de semana en el que mataron a cientos de civiles en Israel y tomaron a otros como rehenes.
El secretario general de la ONU António Guterres encabezó el clamor del lunes, enfocándose en los civiles tanto de Israel como de Gaza, y reiterando su condena a la muerte y secuestro de personas por parte de Hamas. También advirtió sobre la posibilidad de que se pierdan más vidas inocentes.
En una declaración a reporteros en Nueva York, Guterres dijo que más de 137.000 personas en Gaza — alrededor del 6% de la población — se encuentran ahora en albergues de la Agencia de Naciones Unidas para la Población Refugiada de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA). Mencionó reportes de ataques israelíes con misiles en contra de lugares como escuelas, centros de salud y edificios de apartamentos.
“Estoy sumamente afligido con el anuncio de este día de que Israel iniciará un asedio total contra la Franja de Gaza, sin permitir el paso de nada, ni electricidad, ni alimentos, ni combustible”, declaró.
“La situación humanitaria en Gaza era extremadamente grave antes de estas hostilidades. Ahora, sólo se deteriorará de forma exponencial”, indicó Guterres.
El funcionario fue cauteloso de no restar importancia a la devastación y el dolor extremo que atraviesan los israelíes desde el sábado, y criticó el lanzamiento de “miles de cohetes indiscriminados que han llegado al centro de Israel, incluidos lugares como Tel Aviv y Jerusalén”, y cómo cientos de israelíes fueron asesinados y muchos más han resultado heridos.
“Reconozco los agravios legítimos del pueblo palestino. Pero no hay nada que pueda justificar estos actos de terror y el asesinato, mutilación y secuestro de civiles”, añadió Guterres.
También destacó cómo los ataques aéreos de Israel han “vapuleado a Gaza”, y mencionó informes de cientos de palestinos fallecidos y miles de heridos.
En tanto, la Oficina de Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) dijo que los daños en las instalaciones de agua, salud e higiene en Gaza ya han afectado el servicio para más de 400.000 personas, o alrededor de una sexta parte de la población.
Para la tarde del domingo, OCHA dijo que las autoridades israelíes habían suspendido el suministro de electricidad a Gaza, limitando el servicio a un máximo de cuatro horas diarias.
La Termoeléctrica de Gaza era la única fuente de electricidad en el área, y podría quedarse sin combustible “en cuestión de días”, dijo el organismo en un breve comunicado dado a conocer el lunes, añadiendo que se “necesitaba urgentemente” asistencia monetaria para los palestinos.
“Se debe permitir que la asistencia humanitaria y los suministros básicos lleguen a las personas necesitadas, de manera rápida y sin impedimento alguno”, dijo el portavoz de OCHA, Jens Laerke, en un mensaje de texto. “Todas las partes deben garantizar la libertad de desplazamiento de los trabajadores humanitarios”.
La agencia también destacó el desplazamiento dentro de Israel debido a la violencia y el daño en residencias e infraestructura civil.
La agencia reportó el lunes un total de 11 ataques a centros de salud, incluidas instalaciones de salud mental, ambulancias y proveedores, en las primeras 36 horas del conflicto en Gaza.
“Existe una urgente necesidad de establecer un corredor humanitario para los pacientes y el movimiento sin restricciones de personal humanitario y de suministros de salud esenciales”, dijo la OMS. Muchos trabajadores humanitarios expresaron una simple esperanza: Poner fin a la violencia.
“Estas hostilidades sin precedentes — y el rápido incremento en el número de muertos — ponen de relieve la urgencia para que todas las partes pongan fin a la violencia y garanticen la protección de los civiles”, indicó Ana Povrzenic, directora local para los palestinos del Consejo Noruego para los Refugiados.
En un comunicado, el organismo noruego señaló que la situación humanitaria “sigue deteriorándose” en Gaza y que el anuncio de Israel de “asediar” la zona “representa una grave violación a las leyes internacionales”.
Muchos dentro de la ONU piensan en el acceso humanitario a Gaza.
“Hago un llamado a todos los bandos y a las partes relevantes para que permitan el acceso de Naciones Unidas para la entrega de asistencia humanitaria urgente a los civiles palestinos atrapados e indefensos en la Franja de Gaza”, puntualizó Guterres. “Solicito a la comunidad internacional que movilice de inmediato ayuda humanitaria para este fin”.
AP