Brasil ha sido el escenario del descubrimiento del primer híbrido conocido entre un zorro y un perro doméstico, un animal que ha sido apodado ‘Dogxim’. El hallazgo se produjo después de que este animal fuera atropellado por un coche en 2021 y sobreviviera, aunque con heridas.
El híbrido, una hembra joven, mostraba una combinación inusual de características de ambos animales: orejas grandes y puntiagudas, pelaje grueso y duro, y un hocico largo y delgado. Su comportamiento también intrigaba a los expertos, ya que se movía como un zorro, pero ladraba como un perro. Aunque desconfiaba de las personas y no era tan obediente como los perros domésticos, no mostraba signos de agresividad como los depredadores salvajes. Se alimentaba de roedores vivos y, en ocasiones, jugaba con juguetes.
Para determinar la especie a la que pertenecía este curioso animal, se llevó a cabo un análisis genético de su ADN. Los resultados revelaron que se trataba de un híbrido entre un zorro de las pampas (‘Lycalopex gymnocercus’) y un perro doméstico (‘Canis lupus familiaris’).
Este descubrimiento es notable, ya que estas especies divergieron hace unos 6,7 millones de años y pertenecen a géneros diferentes, lo que demuestra que aún pueden producirse híbridos viables entre ellas.
Lamentablemente, la hembra híbrida, conocida como ‘Dogxim’, falleció a principios de este año en un centro de conservación en Brasil por causas desconocidas. Hasta ahora, los híbridos conocidos de perros domésticos y otras especies salvajes pertenecían al género ‘Canis’, como coyotes, lobos y dingos. Este descubrimiento amplía nuestro conocimiento sobre la diversidad y la capacidad de reproducción de estas especies.