Algunas guarderías en el estado alemán de Renania del Norte-Westfalia han considerado la introducción de salas especiales en las que los niños puedan explorar su sexualidad y participar en juegos sexuales. Según informa Die Welt, dos guarderías en ese estado han comenzado a crear espacios donde los niños pueden «descubrirse y satisfacerse físicamente».
Una de las guarderías, ubicada en Kerpen, argumenta que es importante permitir la masturbación en el entorno de la guardería y cree que los niños deben tener la oportunidad de «probar su sexualidad infantil» en un espacio protegido.
Otra guardería en Rheinberg ofrece salas donde los niños pueden jugar al juego del médico y explorar los cuerpos desnudos de otros niños. Según el informe, los niños eligen a uno de sus compañeros para examinar su cuerpo, con la advertencia de que no deben introducir objetos en los orificios corporales.
El Ministerio de la Infancia de Renania del Norte-Westfalia ha expresado que no planea intervenir en estas prácticas, ya que considera que no se puede impedir el comportamiento sexual natural de los niños. Sin embargo, destaca que los padres tienen derecho a opinar sobre la educación sexual en las guarderías y escuelas, debido a las diversas creencias culturales, religiosas y familiares.
A pesar de estas iniciativas en algunas guarderías, se ha señalado que las oficinas estatales de bienestar juvenil no permitirían la introducción de estas salas en el estado. El informe sugiere que si bien estas ideas pueden estar presentes en conceptos educativos, es poco probable que se implementen en la realidad.