El actual mandatario de la nación centroamericana, Nayib Bukele, podría así aspirar de nuevo a la Presidencia en los comicios generales de 2024.
En un marcado giro con respecto a una reiterada jurisprudencia de años atrás, la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia de El Salvador autorizó la reelección inmediata de un presidente para un segundo mandato de cinco años, según una resolución publicada este viernes por dicho órgano y de la cual se han hecho eco medios locales.
El texto ordena al Tribunal Supremo Electoral (TSE) del país que permita que «una persona que ejerza la Presidencia de la República y no haya sido presidente en el período inmediato anterior participe en la contienda electoral por una segunda ocasión».
Era una interpretación errónea
Esto significa que el actual mandatario de la nación centroamericana, Nayib Bukele, podría volver a ser candidato presidencial en los comicios generales de 2024, ya que no ejercía ese cargo durante la legislatura anterior, cuando el Gobierno lo encabezó Salvador Sánchez Cerén.
En sus dos últimas conformaciones, la Sala de lo Constitucional había estipulado que la reelección de un presidente en El Salvador solo era posible después que este permaneciera fuera del cargo por dos mandatos consecutivos de cinco años, argumentando que era esa la garantía de la alternabilidad en el Poder Ejecutivo.
Ahora los nuevos integrantes de ese órgano constitucional, nombrados el pasado 1 de mayo tras la destitución de sus predecesores, consideraron que esta interpretación del artículo 152 de la Constitución era errónea y determinaron que la carta magna sí permite la reelección inmediata, aunque por una sola vez.
«Excesiva restricción»
La actual Sala de lo Constitucional asegura que es menester adaptar el texto de la Constitución «a la voluntad del soberano, a sus necesidades actuales, a cambios sociales y a las nuevas necesidades del soberano». Y subraya que atar la voluntad popular a un texto que respondía a necesidades, contextos o circunstancias de hacer 20, 30 o 40 años ya no resulta una medida garantista, sino una «excesiva restricción disfrazada de ‘certeza jurídica'».
Asimismo, sostiene que sería «ilegítimo» promover «la continuidad del presidente o una reelección más allá de los 10 años, es decir, más allá de dos periodos» o que «el Presidente pretenda permanecer en el cargo sin que esta haya sido la voluntad del pueblo«.
Este sábado, el TSE comunicó que acatará la nueva resolución judicial. «El Tribunal Supremo Electoral reitera su compromiso con el pueblo salvadoreño y su apego irrestricto a las leyes y a la Constitución salvadoreña», adujo.