Este domingo ocurrió un grave accidente en Pakistán, cuando el tren Hazara Express descarriló cerca de la estación de Sahara, cerca de la ciudad de Nawabshah, en la provincia meridional de Sindh. Según el ministro de Ferrocarriles del país, Khawaja Saad Rafique, al menos 28 personas murieron y muchas otras resultaron heridas en el accidente.
El tren, que transportaba a alrededor de 1.000 personas, viajaba desde Karachi, la ciudad más poblada del país, hacia Abbottabad, en el norte, en un trayecto de más de 1500 km que dura aproximadamente 33 horas. Un total de ocho vagones del tren descarrilaron, y el hospital local fue declarado en emergencia debido al gran número de heridos.
Las causas del accidente aún no están claras, y el ministro de Ferrocarriles mencionó dos posibles razones: un fallo mecánico o un sabotaje. Las autoridades están llevando a cabo una investigación para determinar lo ocurrido.
Los accidentes ferroviarios son comunes en Pakistán debido a la falta de mantenimiento en las vías y trenes, que heredaron de la época colonial bajo el Imperio Británico. Desastres similares han ocurrido en el pasado, y en junio de 2021, al menos 65 personas murieron y otras 150 resultaron heridas en la colisión de dos trenes en el sur del país. Además, en octubre de 2019, al menos 75 pasajeros murieron en un incendio a bordo de un tren expreso Tezgam, y en 2005, la colisión de dos trenes en Ghotki causó la muerte de más de 100 personas.