Millones de niños en todo el mundo no solo van al cole con el estuche, los cuadernos y los libros de texto. En la mochila (o en sus bolsillos) meten el smartphone, algo que siempre se vio como un tema delicado y que ahora está viéndose de forma aún más preocupante.
La Unesco pretende vetar los móviles en el cole. La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco) ha publicado un informe en el que afirma que hay evidencias de que el uso excesivo del móvil estaba asociado a un peor rendimiento académico y que los altos niveles de tiempo invertidos en pantalla tienen efectos negativos en la estabilidad emocional de los niños. Solución: erradicar los móviles de los coles.
La interacción alumno-profesor debe ser la la clave. Aunque Unesco defiende el uso de la tecnología y afirma que «la revolución digital encierra un potencial inconmensurable», debe ser usada «para mejorar las experiencias de aprendizaje», pero esas conexiones online «no son sustitutas de la interacción humana». Admiten que la tecnología fue todo un salvavidas durante la pandemia y sobre todo durante el confinamiento, pero añadieron que hay que valorar pros y contras: «no todos los cambios constituyen un profreso. Solo porque algo pueda hacerse no significa que deba hacerse».
Uso excesivo. Según el estudio, hay datos de evaluaciones internaciones a gran escala que plantean una «relación negativa» entre el uso excesivo de tecnología digital y el rendimiento de los estudiantes. Esa tecnología no se reduce a teléfonos móviles, también incluye el uso continuado de tabletas o portátiles que según esos datos puede distraerles, perturbarles y tener un impacto perjudicial en el aprendizaje.
No está demostrado que la tecnología ayude. La Unesco añade que no hay evidencias especialmente claras de que el uso de la tecnología añada valor a la educación. De hecho, apuntan a que quienes defienden esos beneficios son empresas privadas de educación que tratan de vender sus productos de aprendizaje digital. Probablemente esas empresas no estén de acuerdo.
Ya hay algunos países que vetan el móvil en el cole. Según la Unesco, entre los 200 sistemas educativos analizados por todo el mundo, solo seis países prohíben actualmente el móvil en el cole. Entre ellos están Francia—que introdujo estas políticas en 2018— y Holanda, que activará la restricción en 2024. Algunos países tienen normativas flexibles, pero en Unesco abogan por un veto global.
La España dividida. En España y Alemania la activación de estas medidas dependen de las comunidades. Nuestro país está dividido en este sentido, y aunque hay algunas comunidades autónomas que ya lo han prohibido —Galicia, Castilla La Mancha y la Comunidad de Madrid— otras no lo han hecho. Cuando Madrid lo hizo, los gobernantes aludieron a que la intención era «mejorar los resultados académicos y de combatir el ciberacoso y el bullying en los centros escolares». El resto de las comunidades deja la decisión en manos de los colegios.