Abinader ha mostrado gran capacidad como estratega político, pero un reducido círculo lo acompaña en tarea
Cuando se investiga sobre el equipo que compone el line up político de Luis Abinader, la versión más socorrida es que el gobernante escucha a muchos asesores y colaboradores políticos, pero que ninguno tiene un nivel de influencia determinante en las decisiones políticas del presidente de la República, que la estrategia que implementa “está en su cabeza” y que nadie sabe a ciencia cierta cómo actuará en cada caso.
Las pruebas de la gran capacidad política del gobernante demuestran que desde la oposición logró construir una alianza que se convirtió en opción de poder que supo capitalizar los errores del PLD.
Desde el Gobierno la mayor prueba de su condición de estratega político es que ha logrado aglutinar alrededor de su figura a los grupos históricamente antagónicos del país, liberales y conservadores apoyan el gobierno de Abinader.
A pesar de la autonomía que conserva el jefe del Estado en la toma de decisiones, cuenta con un cercano equipo de colaboradores con quienes discute los temas estratégicos del Gobierno.
La lista la encabezan José Ignacio Paliza, Deligne Ascención, Luis Valdez, Eduardo (Yayo) Sanz Lovatón y Samuel Pereyra. A la lista hay que agregar a Mauricio de Vengoechea, el principal asesor político de Abinader y figuras como Angelita Peña, asesora del gobernante y con gran experiencia política.
Entre los colaboradores cercanos del presidente de la República también figuran aliados como Eduardo Estrella, presidente del Senado y los de reciente ingreso a la Dirección Ejecutiva, Víctor (Ito) Bisonó y Roberto Ángel Salcedo.
Es el equipo responsable de poner en marcha la estrategia del Gobierno basada en la narrativa del bienestar económico y la eficacia de la gestión del Partido Revolucionario Moderno (PRM) al frente del Estado.
Igualmente, han diseñado la estrategia de la transparencia como un plus para la gestión de Abinader en contraste con los gobiernos del PLD.
Igualmente, esos dirigentes y colaboradores del PRM han sido los responsables de operar la estrategia de conquista de dirigentes de la oposición, especialmente alcaldes y directores de distritos municipales para que pasen a las filas del partido oficial.
Paliza es el presidente del PRM desde 2018 y este año fue escogido para otro periodo de cuatro años, en ambos casos impulsado por Abinader.
Tras la llegada al Gobierno fue nombrado en la importante cartera del Ministerio Administrativo de la Presidencia. En muchos casos hace el papel de vocero del presidente de la República y del Gobierno y también responde a las críticas de la oposición cuando es necesario.
Valdez, del equipo que fundó el proyecto de Abinader para la presidencia desde 2007, ha sido miembro de la Dirección Ejecutiva desde la fundación del PRM y se desempeñó como el encargado de finanzas de la campaña de 2016 y 2020. Tras la llegada del PRM al poder, fue designado director de Impuestos Internos (DGII).
Figura entre los dirigentes de mayor confianza del presidente de la República y tiene un agudo olfato político.
Deligne Ascención, uno de los primeros en formar parte del proyecto de Abinader, ha sido secretario de organización del PRM desde su fundación y fue reelecto por cuatro años más.
Ha sido el responsable principal de la construcción del padrón del PRM y ahora asumió la presidencia de elección interna tanto para la escogencia de las nuevas autoridades como para el proceso interno de selección de los candidatos para las elecciones de 2024.
Yayo Sanz es una de las figuras del PRM en la capital y fue escogido por segundo periodo como titular de finanzas del PRM. Desde el inicio de gestión fue designado director de Aduanas (DGA). Su nombre suena como posible jefe de campaña del PRM para las elecciones de 2024. Fuente El Caribe