¿Hay vida en Encélado, la luna de Saturno? Esto es lo que ha descubierto el James Webb

Saturno tiene más de 100 satélites o lunas pero, una de ellas, es realmente intrigante y prometedora. Encélado se encuentra a 1.272 millones de kilómetros de la Tierra pero los ojos del telescopio espacial James Webb son muy poderosos. Llegan hasta para ver galaxias lejanas tenues tal y como eran hace más de 13.000 millones de años (poco después de la formación del universo que data de hace 13.770 millones de años).

Ahora, el telescopio James Webb de la NASA ha detectado una columna de vapor de agua «sorprendentemente grande»procedente del polo sur de Encélado, la sexta luna más grande de Saturno. Webb pudo observar este penacho el 22 de noviembre de 2022, y los científicos han estado estudiando los datos enviados desde entonces. Solo fueron 4,5 minutos de observación, pero tiempo suficiente para obtener todos los datos necesarios. Los científicos del Southwest Research Institute (SwRI) identificaron una gigantesca columna de vapor de agua, que abarca casi 10.000 kilómetros, que brota de esta luna. La enormidad de esta distancia de la columna equivale a la distancia entre los EE. UU. y Japón.

Este hallazgo es muy interesante, ya que Encélado es uno de los mundos helados más intrigantes de nuestro sistema solar. Ahí donde parece una simple bola de nieve de tamaño considerable, se cree que su capa exterior helada esconde un océano global de agua líquida, que podría albergar vida. Y ese océano sale regularmente a borbotones a través de las grietas en el hielo para formar columnas que rocían agua y moléculas orgánicas sobre la superficie de la luna y hacia el espacio. La columna observada por el telescopio James Webb con sus ojos infrarrojos es mucho más grande que cualquier otra que hayamos detectado anteriormente.

Es tan grande (más de 9.600 kilómetros de alto), que es unas 20 veces más ancha que la propia luna y el agua que rocía sale a una velocidad de 300 litros por segundo. A este ritmo, podrías llenar una piscina olímpica en solo un par de horas. En comparación, hacerlo con una manguera de jardín en la Tierra llevaría más de 2 semanas. ¡Una enorme columna de agua con un chorro impresionante! Recordemos que Encélado mide 505 km de ancho, lo que resulta del todo increíble. No en vano, una de las características más llamativas de Encélado son precisamente sus enormes y activas columnas de vapor de agua. Sobre todo porque las plumas podrían contener evidencia de vida.

Ilustración artística de Encélado

La misión Cassini de la NASA (2004-2017) ya reunió en su día pruebas tentadoras de la química necesaria de Encélado, al volar regularmente a través de los géiseres y tomar muestras del agua con sus instrumentos, aunque no realizó una detección biológica directa. Pero los científicos creen que su océano salado subterráneo, la fuente del agua, podría contener las condiciones básicas para sustentar la vida.

«Cuando miraba los datos, al principio, pensaba que tenía que estar equivocado. Fue tan impactante detectar una columna de agua de más de 20 veces el tamaño de la luna», explicó Geronimo Villanueva del NASA Goddard Space Flight Center en Greenbelt, Maryland: «La columna de agua se extiende mucho más allá de su región de liberación en el polo sur. En las observaciones de Webb, no solo el penacho era enorme, sino que había agua absolutamente en todas partes”. 

Además, la luna está alimentando un suministro de agua a todo el sistema de Saturno, incluido el planeta mismo y sus otras lunas. Al analizar los datos de Webb, el equipo encontró que aproximadamente el 30 por ciento del agua permanece dentro de este toroide, mientras que el otro 70 por ciento escapa para abastecer al resto del sistema. Concretamente, la luna, mientras orbita Saturno en 33 horas, dispersa agua, formando un halo en forma de rosquilla en su camino.

A la luz de estas sorprendentes revelaciones, los investigadores ya se están preparando para realizar más estudios sobre Encélado utilizando nuevamente el JWST el próximo año.

“Buscaremos indicadores específicos de habitabilidad, como firmas orgánicas y peróxido de hidrógeno”, aclaró Glein. “El peróxido de hidrógeno es particularmente interesante porque puede proporcionar fuentes de energía metabólica mucho más potentes que las que identificamos anteriormente. Cassini no nos dio una respuesta clara sobre la disponibilidad de oxidantes tan fuertes en Encélado”.

Por el momento, la luna se ha puesto en la parte superior de la lista de los lugares más prometedores en los que podríamos encontrar vida.