Tony La Russa, quien salió de una década de retiro para dirigir a los Chicago White Sox, está en una muy buena posición en la difícil misión que tiene con su edad y la historia de Grandes Ligas (MLB), tras casi cinco meses de la temporada del 2021.
La Russa, quien a los 76 años es el tercer dirigente más viejo de todos los tiempos en las ligas mayores del béisbol estadounidense, tiene a los White Sox con una ventaja de 10 juegos en el primer lugar de la División Central de la Liga Americana, después que jugaron 125 de sus 162 encuentros de la serie regular.
Chicago (72-53), que ha liderado su sector desde el 7 de mayo, busca su undécima participación en la postemporada y apariciones consecutivas en ese tramo por primera vez en su historia de 120 años. La temporada pasada, Chicago clasificó a los playoffs con un puesto comodín y fue eliminado en la primera ronda por los Oakland Athletics.
Pese a que quebró una racha del club de 12 años sin jugar en octubre, el manager mexicoamericano Rick Rentería fue despedido para que La Russa, un miembro del Salón de la Fama desde el 2014 y quien optó por retirarse tras ganar la Serie de Mundial del 2011 con los St. Louis Cardinals, intentara poner a los White Sox en el siguiente escalón.
Y ese nivel es la Serie Mundial, que Chicago solamente ha disputado cinco veces en su historia (y la ganó en 2005, 1917 y 1906) y apenas en una ocasión (2005) en más de un siglo.
«Mi mayor temor es no intentar algo que tienes la oportunidad de hacer porque podrías fallar o avergonzarte. Es mejor intentarlo, avergonzarse y fallar, que no intentarlo», dijo La Russa, quien debutó como manager de MLB en 1979, con los White Sox.
Restando cinco semanas de acción, Chicago posee el tercer mejor diferencial de carreras (617-490, +127) de la Liga Americana, detrás de los Houston Astros (+184) y los Tampa Bay Rays (+150). En la Liga Nacional, los Los Angeles Dodgers (+204) y los San Francisco Giants (+142) también están mejor situados.
Todas esas novenas, más los New York Yankees, Boston Red Sox, Atlanta Braves, Milwaukee Brewers y San Diego Padres, principalmente, son potenciales obstáculos entre el conjunto del lado sur de Chicago y el trofeo del comisionado.
Para mejorar sus probabilidades, el equipo con con la cuarta mejor efectividad del joven circuito (3.69) reforzó notablemente su bullpen en la fecha límite de cambios con Craig Kimbrel y Ryan Tepera y recuperó de la lista de lesionados a sus jóvenes jardineros Eloy Jiménez y Luis Robert y está cerca de incorporar al receptor Yasmani Grandal, para juntarlos con el grupo que lidera el poderoso inicialista cubano José Abreu.