La República Dominicana y Estados Unidos cumplieron el domingo 26 de marzo 139 años de relación diplomática, estableciéndolas en 1884, es decir, 40 años después que la media isla consiguiera liberarse del yugo haitiano.
«República Dominicana y Estados Unidos celebran hoy 26 de marzo, 139 años de amistad», recordó el Ministerio de Relaciones Exteriores al tiempo que ratificó la «buena voluntad» del Gobierno dominicano «de seguir estrechando los vínculos entre ambos países para el fortalecimiento de nuestras relaciones bilaterales».
En la publicación del recordatorio de las relaciones bilaterales, el ministerio señaló que entre las dos naciones hay un total de 6,244 millones de dólares en exportaciones y 1,333 millones en importaciones, mientras que el total del comercio entre EEUU y República dominicana asciende a 1,958 millones de dólares.
Las relaciones de los dos países son denominadas como «sólidas, aunque complejas» por la Embajada de Estados Unidos en Santo Domingo en su página web, en la que destacan que República Dominicana «ha vivido una serie de golpes de Estado, intervenciones y ocupaciones militares estadounidenses, gobiernos militares y gobiernos democráticos», desde su fundación en 1844.
Actualmente para EE.UU., República Dominicana «es un socio importante en los asuntos hemisféricos debido a su posición en el Caribe como la economía más grande y el segundo país en cuanto a población y territorio, por su comercio bilateral con los Estados Unidos y su cercanía con los Estados Unidos», recalca la embajada estadounidense.
Asimismo, señala la lucha contra el tráfico de sustancias ilícitas y de personas, en la extradición de fugitivos, y en la introducción de medidas para prevenir la migración ilegal, como los trabajos de cooperación bilaterales.
«Los Estados Unidos mantiene un fuerte interés en una República Dominicana democrática y económicamente saludable y estable y apoya su desarrollo democrático y económico», rescata la embajada estadounidense en Santo Domingo en su apartado «Políticas e historia», antes de señalar algunos aspectos que entiende que todavía faltan por corregir en el país, como la violencia y la desigualdad salarial.
En Estados Unidos viven 2,393,718 dominicanos, lo que representa el 84 % de los dominicanos que residen en el extranjero, según el informe del Instituto de Dominicanos y Dominicanas en el Exterior (INDEX) presentado este año y que recoge los datos estadísticos de 111 países del mundo hasta diciembre de 2022.
Relación bilateral en los últimos meses
Desde la llegada de Joe Biden a la Casa Blanca, la República Dominicana no cuenta con un embajador de los Estados Unidos, sin que hasta el momento el Gobierno estadounidense ingrese una nominación para ocupar el puesto.
El liderazgo de la misión diplomático fue asumido por Robert Thomas, como el encargado de Negocios de la Embajada de EE.UU en Santo Domingo a la salida de Robin Bernstein en 2021. Thomas salió del país para ocupar un nuevo puesto en el Departamento de Estado de EE.UU. a principios de marzo, dejando en el cargo a Alexander Vitolo.
Un tema que ha ensombrecido la relación entre ambos países en las últimas semanas, es la negativa de EE.UU. a renegociar el Tratado de Libre Comercio entre Estados Unidos, Centroamérica y República Dominicana (DR-Cafta, por sus siglas en inglés), el cual estipula que el arroz importado desde EE.UU. tendrá una tasa arancelaria cero a partir de 2025 y que fue firmado entre 2003 y 2004. La República Dominicana se adhirió en 2004 y entró en vigencia en el país el 1 de marzo de 2007.
A pesar del riesgo que muchos han expresado para los agricultores dominicanos, una carta de un funcionario estadounidense señala que «Estados Unidos no apoya la reapertura o renegociación de los compromisos de acceso al mercado bajo el DR-Cafta».
En noviembre del 2022, Estados Unidos también prohibió la entrada de los embarques de azúcar sin refinar y los productos a base de azúcar producidos en la República Dominicana por Central Romana Corporation Limited (Central Romana), bajo el alegato de que la empresa presentaba indicadores de trabajo forzoso.
El veto se mantendrá hasta que el Central Romana corrija las sanciones que señala el Gobierno estadounidense, habría dicho Robert Thomas en diciembre cuando aún ejercía como encargado de Negocios de la Embajada, al tiempo que indicaba que trabajarían con la empresa para «remediar estas preocupaciones».
En reiteradas ocasiones, los funcionarios de la Embajada de EE.UU. en Santo Domingo han señalado que la relación entre ambos países es «especial» y «de amistad», resaltando la cantidad de dominicanos que viven en territorio estadounidense, así como la cantidad de turistas de EE.UU. que viajan cada año para visitar a la República Dominicana.