La crisis bancaria pinta mal, pero dibuja un consuelo en el horizonte: el petróleo al fin está bajando

Si hay una disciplina en la que se cumpla esa vieja metáfora del «efecto mariposa», la que nos habla de cómo un ligero aleteo aquí puede desencadenar un huracán en la otra punta del globo, la economía es clara candidata. Ejemplos hay de sobra. El último, con nombre propio: Silicon Valley Bank (SVB). Su colapso, que no se puede entender a su vez sin las subidas de tipos de interés con las que la Reserva Federal estadounidense (Fed) ha tratado de combatir la inflación a lo largo del último año, ha generado turbulencias y azuzado el miedo a una crisis financiera.

Con ese complejo telón de fondo, los mercados asisten ahora a otra tendencia, igual de relevante: un descenso sensible en el precio del crudo.

¿Qué muestran los datos? Una curva descendente. Las tablas de Investing revelan una caída sensible en los futuros del petróleo Brent y del crudo WTI (West Texas Intermediate), la principal referencia en el mercado estadounidense. Y todo esto con el recuerdo aún reciente de la intensa escalada de precios que registró el crudo en 2022. Hace más o menos un año, sin ir más lejos, el Brent del Mar del Norte tonteaba con valores próximos a su máximo histórico de 2008.

La foto aportada por la plataforma económica el viernes refleja que el precio del barril Brent para entrega en mayo finalizó la jornada en el mercado de Londres a 72,53 dólares, un 2,67% menos que al término de la sesión anterior. Su cotización había retrocedido por quinta sesión consecutiva y se despedía de la semana con una disminución de más del 12% con respecto al viernes anterior, cuando las noticias sobre el colapso del Silicon Valley Bank eran todavía recientes.

Un poco de contexto. Como recuerdan en Axios, los precios del petróleo han caído a sus niveles más bajos desde finales de 2021. Y lo han hecho en medio de un escenario muy específico, marcado por el colapso de SVB, el episodio de Signature Bank o las crisis sufridas en Credit Suisse y First Republic. «Las preocupaciones del mercado en general relacionadas con el sector bancario han pesado sobre activos de riesgo, mientras el petróleo también está viendo algunos fundamentos débiles en este momento”, valoraban a principios de semana los economistas de ING.

«Los fundamentos subyacentes no son tan terribles como lo que se cotiza aquí, pero existe la preocupación de que el petróleo no sea un lugar tan seguro como el efectivo o el oro», comenta a Reuters John Kilduff, socio de Again Capital LLC.

Un diagnóstico claro para el sector. En la OPEP+ lo tienen claro. Para el organismo que aglutina a los grandes exportadores, el descenso de los precios del petróleo a mínimos que no se veían desde hace más de un año no se explica por un desequilibrio entre la oferta y la demanda, sino por algo menos mensurable: los temores financieros. De hecho, confía en que el mercado acabe estabilizándose.

«Está puramente impulsado por las finanzas”, recalca a Reuters uno de sus delegados. Desde el colectivo defienden que en el último informe mensual sobre el mercado de petróleo, de hace solo unos días, se prevé una mejora de la demanda de China y se apunta además a un equilibrio entre la oferta y demanda.


Comparativa petróleo Brent y petróleo WTI pic.twitter.com/AiPwwtIyUT

— Ismael De La Cruz (@delacruz_ismael) March 15, 2023

¿Qué podemos esperar? Una pregunta similar se planteaban hace días los analistas de ING: «La pregunta clave para el mercado es: ‘¿Dónde está el piso?’ Esto dependerá en gran medida de la OPEP+ y de EEUU». En su informe señalan que, dada la escala, no se descartaba que el organismo opte por intervenir para estabilizar el mercado. «Aunque hasta ahora ha estado muy tranquilo», zanjan.

«En cuanto a los EE UU, el gobierno había dicho anteriormente que buscaría recargar sus reservas estratégicas de petróleo siempre y cuando el WTI se negocie a alrededor de US$70/bbl en la región», inciden. Desde Axios señalan otra clave: a lo largo de los próximos meses la caída del precio del petróleo debería repercutir a su vez, y en igual sentido, en la inflación. De ser así el escenario podría favorecer que la Fed suavice las subidas de tipos. Quedan preguntas, en cualquier caso, como si la OPEP tocará la producción o cómo los precios afectarán a la producción.