Las aerolíneas estadounidenses JetBlue y Spirit defendieron este martes su plan de convertirse en un «competidor nacional convincente» tras formalizarse el proceso de compra por 3,800 millones de dólares, que haría a JetBlue la quinta línea aérea más grande de EEUU.
«Al unirnos expandiremos la oferta única de JetBlue, donde los clientes no tienen que elegir entre una tarifa baja y una gran experiencia, para impulsar la competencia a nivel nacional», dice un comunicado conjunto tras darse a conocer una demanda presentada por el Departamento de Justicia (DOJ) que busca impedir la compra de Spirit, alegando que la fusión afectaría al mercado y a los consumidores.
«Suprimir la competencia entre JetBlue y Spirit (…) eliminaría el papel único y disruptivo de Spirit en la industria y haría un daño significativo a los consumidores», aseguró el titular de la cartera de Justicia, Merrick Garland.
Ante esta acusación, JetBlue resaltó «su capacidad para obligar a las aerolíneas tradicionales a reaccionar ante las tarifas bajas», asimismo señaló que el DOJ ya ha afirmado que la empresa es «una fuente importante y constante de competencia», incluso llamó «Efecto JetBlue» a los resultados para reducir las tarifas de los vuelos.
Además, el comunicado señala que JetBlue y Spirit compiten con otras aerolíneas, no entre sí, ambas compañías «se superponen sólo en el 11 % o menos de las rutas sin escalas en las que ambos vuelan», según el documento publicado este martes.
«Los clientes merecen un mercado de aerolíneas competitivo y buscaremos esta fusión para asegurarnos de que lo obtengan», dijo en el comunicado Robin Hayes, CEO de JetBlue, al tiempo que indicó que el DOJ «se equivocó con la ley» .
Hayes dijo que el Departamento de Justicia no entiende que la compra de Spirit por parte de JetBlue creará un «competidor» de tarifas bajas y alta calidad, frente a las cuatro aerolíneas que dominan cerca del 80 % del mercado estadounidense -American Airlines, Delta Air Lines, United Airlines y Southwest Airlines-.
En tanto que el CEO de Spirit, Ted Christie, indicó su desacuerdo con la demanda federal que busca bloquear la fusión y aseguró que defenderán «enérgicamente» su posición de que «una combinación de JetBlue y Spirit cambiará las reglas del juego para los clientes» de todo Estados Unidos.
«Juntos tenemos la intención de democratizar los vuelos para los viajeros de todo el país, un objetivo que, creemos, merece el apoyo del gobierno», puntualizó Christie.
De acuerdo con el comunicado, JetBlue y Spirit juntas seguirán siendo más pequeñas que las cuatro aerolíneas que dominan el mercado, la participación de ambas en el mercado será solo del 9 %, en comparación de las 16-24 % de cada una de las grandes empresas.
Beneficios de la fusión
EE.UU. considera que la compra de la aerolínea de bajo coste Spirit tendría un impacto negativo sobre los viajeros, que verían reducida su oferta de vuelos al tiempo que aumentaría el precio de los billetes de avión.
En este sentido, Garland recordó que la propia junta de Spirit dijo a sus accionistas que el plan de JetBlue para reconfigurar los vuelos resultarían en «una disminución de la capacidad y aumentarían los precios para los consumidores».
JetBlue explicó que «muchas de las aeronaves de Spirit continuarán volando en su configuración actual durante el proceso de modernización después de que se cierre la transacción, no habrá cambios en la capacidad a corto plazo», zanjó la empresa, al tiempo que rescata que los usuarios se beneficiarán con más servicios y la expansión continua de la aerolínea.
JetBlue asegura que tras la compra reacondicionará las aeronaves de Spirit «con su experiencia líder enfocada en el cliente», como disponer de más espacio para las piernas de los pasajeros y otras comodidades a bordo de las unidades.
«La aerolínea combinada también podrá aumentar significativamente la utilización de la aeronave, compensado los asientos eliminados en el proceso de reacondicionamiento al agregar más vuelos», es otro de los beneficios que señala JetBlue.
Asimismo, rescata que «la combinación desbloqueará oportunidades a largo plazo para agregar más destinos y rutas que de otro modos no serían posible».
Spirit anunció el pasado julio que aceptaría la oferta de JetBlue, a pesar de que antes había expresado su preocupación por la posible adquisición debido a la alianza que firmó la aerolínea con American Airlines en el área noreste de EE.UU., y el Departamento de Justicia también trata de bloquear.