Los seguros son una de esas cosas necesarias, pero aburridas. Lo único sexy que tiene un seguro es poder decir que has conseguido ahorrar un dinero por él o que la aseguradora te ha cubierto un imprevisto que no era grave.
Hasta los consejos para ahorrar con tus seguros son aburridos. Solo tienes que pensar en el clásico “revisa la póliza y ten cuidado con la letra pequeña”. ¡Nadie quiere leerse el contrato de su seguro! Y es normal, porque lo más fácil es no entender muchos de los términos y expresiones que utiliza.
La realidad es que si quieres acertar con tu seguro y ahorrar es posible que tengas que mirar la póliza o, por lo menos un resumen de las condiciones. De eso no te vas a poder librar, aunque sí te vamos a decir exactamente qué mirar y dónde encontrarlo para ahorrar tiempo y dinero.